martes, noviembre 9

Andar en bici en el D.F.

Después de pimpear mi bicicleta:



De aprender a manejarla con distintos tipos de tacones:





Y de aprender a esquivar ladies troca de las que abundan por mis lares, me dispuse a transportarme en ella al trabajo. 

La neta la neta, le temía a esos conductores que sin querer (por pendejos) cuando vas en carro te dan un besito en las facias y se disculpan con un 'no me fijé', ya que si alguien se echaba en reversa de pendejada o no se 'fijaba', en lugar de abollarme el carro, me quebrarían las patas. Y no, no quiero volver a pasar las de Misery (se acuerdan de aquella película en la que un escritor, interpretado por James Caan, queda postrado en cama a merced de su fan from hell -nada más y nada menos que Kathy Bates-?).

Bueno ya, volvamos al tema. He aquí lo que de mis andanzas bicicleteras he podido observar:

1. Es un paro que las banquetas tengan rampa para discapacitados, así no tengo que estar a par de los carros al cruzar avenidas muy atascadas, PERO la gente huevona insiste en subir y bajar la banqueta por la rampita esa, pues qué se creían que iban a hacer el violento ejercicio que equivale a subir un escalón.

2. Esas amiguitos que caminan en bola ocupando todo lo ancho de la banqueta no sólo son molestos para los demás peatones, sino también para las bicicletas. 

3. Cuando los padres recogen a sus hijos fuera de las escuelas se avientan a cualquier vehículo en movimiento (incluidos carros, desde luego) sin importar su velocidad, con tal de pasar antes. 

4. Digamos que hay un estrecho camino y quedan de frente peatón y bicicleta. El peatón se queda estático frente a la bicicleta (esperando que se quite, por supuesto) sin notar que es más fácil que él se haga a un lado. 

5. El caminar de un lado a otro sobre la banqueta sólo se lo aguanto al personaje de Singing in the rain. Los demás son la versión movidita de Rain man.

6. Y por supuesto, las ladies troca siguen llevándose el premio por no ceder el paso ni a madrazos. 

Fuera de eso y de que en esta época se me congelan los dedos en el manubrio porque uso estos guantes:



Ah sido RE bonito volver a andar en dos rueditas.

Vamos, háganlo.

Si quieren comprar o pimpear su bici:

les recomiendo Jack Rabbit, donde el chavo que atiende es re buena onda y alivianado.
NO les recomiendo City bikes, la vendedora es bien mamona y nomás no ayuda.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

HOla!!

A riesgo de parecer parecer metiche, te recomendaría usar guantes de ciclista o guantes piel en lugar los gunates téxtiles que muestras en la imagen. Esos guantes textiles son calienitos hasta que corre aire frío y se cuela por entre el tejido hasta tu piel y eso no es bonito.

Aparte, me da gusto ver que cada vez hay más y más gente en bici trasnportándose por la ciudad.

SAludos! =)

MIGUEL ANTONIO LUPIÁN SOTO dijo...

Sí, tu bici quedó bien chida. Tienes razón, los peatones no sabemos caminar ni en las banquetas y bueno, de las ladies troca ni hablamos. Además de los guantes de ciclista que te recomiendan, deberías llevar unos globos llenos de agua en la canastilla. Verás lo rápido que se quitan, jojo. Ah, y los tacones ¡buenísimos!

La Rumu dijo...

Gracias por el tip! Buscaré unos guantes que no parezcan de vago, jeje.

Seee, el tacón de zombie es la neta.

Leliel dijo...

Si despues de tanto tiempo sigues con animos de darle a la bicicleta urbana, supongo ya viste que es bueno comprarse uno de esos timbrecitos de panadero, hay unos muy coquetones que quedarian excelente con tu bici.

P.D.
No se si te enteraste que el año me andaba medio matando por hacer ciclismo de montaña, ahí me dí cuenta de lo importantes y utiles que pueden ser un par de muñequeras platicas, ellas me salvaron de quedar sin piel tambien en las manos, (aunque tambien fueron las culpables de quemarme a piel viva los antebrazos por no usar coderas) Protegete =P