Ha llegado el propanolol, la pastilla contra los malos recuerdos, también conocida 'cuando el eterno resplandor de una mente sin recuerdos nos alcance' ¬¬
Algo había escrito, que a fuerza de borrar el camino sin mirarlo, se vuelve al mismo. Y no podría referir la ciclicidad del descubrimiento de tales efectos mejor que Borges, cuando en sus Otras Inquisiciones dice que el pasado es indestructible; tarde o temprano vuelven todas las cosas y una de las cosas que vuelve es el proyecto de abolir el pasado, porque ni la venganza, ni las cárceles, ni el perdón, ni el olvido pueden modificarlo.
Por mi parte me quedo con los recuerdos que, entre otras cosas, sacuden el polvo de la memoria.
Ah! casi dejo pasar en blanco el 14 de febrero, sirva para ilustrarlo,esta amorosa cita de Cien años de soledad:
- Fíjate qué simple es -, le dijo Amaranta
- Dice que se está muriendo por mí, como si yo fuera un cólico miserere -
6 comentarios:
Chale, la cita es muy pinche y mas pinche es sufrirla
El peor crimen es el olvido, lamentablemente vivimos en un mundo donde la máxima utopía es el nepente, igual que tú me quedo con los recuerdos, sin el perdón, en fin con la vida
A mi me gusta esta:
"El amor es lo más parecido a las mentiras. Justifica u opaca a la razón, por derecho o torcido que parezca, no requiere de justificaciones, se reproduce a la menor provocación y exige todo el crédito del mundo. Además de que nadie o casi nadie puede vivir tranquilo en su total ausencia."
Diablo Guardían
Tampoco creo que lo óptimo sea olvidar lo malo y ya. El sufrimiento también es buena ayuda para aprender, porque como bien apuntas, la vida es una gran espiral y el mundo es taaan pequeño, que siempre nos volvemos a econtrar con aquello que por algun momento nos gustaría olvidar.
Después de tal respuesta el sujeto en cuestión queda curado de espanto al repetir el clásico 'me muero por tí'
Gran cita esa la de Diablo, tiene otra bien ácida que dice más o menos: el amor es como la coca, primero te hace reina y luego te va pudriendo...
Mi querida profa, esos reencuentros me ocasionan un mareo, bien dice nuestro Calamaro querido 'para vivir hacen falta muchas cosas, pero sobra lo que no existe más'
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